FIRST AMAZING WEEK!

Después de todo, ya estoy al final de mi segunda semana en Hastings, el ingles empieza a fluir por mi cabeza y cada vez me resulta más fácil poder mantener una conversación en ingles diciendo exactamente lo que quería decir. En la escuela, un edificio marginal para estudiantes de internacionales de ingles en medio de unas grandes y lujosas instalaciones para los estudiantes ingleses, empieza a haber vidilla; la semana pasada no había casi estudiantes… pero con la llegada de más españoles y de empezar a ofrecer actividades extraescolares los días grises se hacen más largos e interesantes ahora.

Las actividades en las que me he apuntado… es decir, todas las que se han ofrecido y todas las que yo he propuesto son:

- El lunes arrastrar a un chica de Madrid y un chico Turco pero que vive en Inglaterra a unas clases de salsa en un lujoso restaurante y bar del paseo marítimo. 45 minutos de chachachá y más de una hora de salsa. Podéis imaginar el percal, las instrucciones en ingles mientras la música sonaba, cambios de pareja continuos… por lo que no entendía nada de lo que me decían. Dsp, pista abierta para bailar hasta las 12 de la noche.


El martes más clase de salsa pero organizadas por la escuela y 6 españoles dispuestos a darlo todo en la pista. Como era en el pueblo de al lado, fuimos con el minibús de la escuela. Tras dos hora más de clase, tuve la suerte de conocer a una mujer de 60 años bajita, muy delgada y con mucho ritmo que estaba empeñada en bailar conmigo para enseñarme ella nuevos pasos.

Miércoles, ir a Ashford de compras con dos rusos y un francesa. No me compre nada, pero fue muy divertido convivir con ellos.

Jueves, ir a tomar unos cuantos. Es de camino al abr donde me sucedió la anécdota de la semana. En una de las calles más importantes a la vez que oscuras de la ciudad y de las que la gente dice que es peligroso pasar solo me toco ser el cabeza de turco… mientras baja por ella me encuentro de frente tres chicas ingles cada una de ellas más fea que la anterior que sin cortarse un pelo me saludaron con una sonrisa en la boca diciéndome “Hello sexy” a la vez que mientras pasaban, una tras la otra fueron dándome un golpecito cariñoso de pequeña ninfomanía en mis sagrados cojones… Pam! Pam! Pam! I de gratis tres caricias a mi rabo! En españa se tendria que pagar y ni así...


El viernes fue el día perfecto para culminar la semana, tras las clases, fui a visitar la pequeña playa nudista gay que hay en el pueblo (la pequeña Sitges decia mi profesor) después de una preciosa caminata por las montañas… todo ello organizado por la escuela. Y por la noche, 7 españoles enseñaron a 1 italiana, 2 rusos, 1 chica de Dinamarca y una francesa la actividad nocturna española del botellón para instaurarla en Hastings. Una noche que acaba tras el beber en la playa en un pub del centro que como todos cerraba a las 3 y había inglesas borrachas bailando provocativamente para finalmente irme a dormir a las 5 de la mañana.


La escuela empieza a coger ritmo!